Redes fantasmas, un peligro contra el océano
by spotmydive
Cada año, diezman a cientos de criaturas que pueblan los mares y océanos: ¡verdaderos asesinos silenciosos! se trata de redes fantasmas. Abandonados o perdidos, persiguen los fondos marinos y representan alrededor del 10% de los desechos marinos. Por desgracia, este fenómeno es demasiado poco conocido por el público.
¿Qué es una red fantasma?
Las redes fantasma son aparejos de pesca como líneas y anzuelos, plomadas, señuelos, nasas, trampas, redes y palangres. Su pérdida es, en la mayoría de los casos, accidental, pero también se debe a este fenómeno:
• aparejos a la deriva con la corriente, desastres naturales como tormentas,,
• Mantenimiento deficiente del equipo;
• Desconocimiento de los fondos marinos pescadores jóvenes.
• Actividades de pesca ilegal o no regulada
Los aparejos de pesca tienen un alto coste de entre 15.000 y 20.000 euros. Los pescadores no tienen ningún interés en perderlos. Desafortunadamente, algunos no dudan en desechar las redes usadas en el mar debido al difícil o inexistente acceso a las instalaciones de eliminación o reciclaje. Otros lo hacen maliciosamente o con el deseo de hacer daño.
Las nuevas técnicas de pesca son tan problemáticas como la pesca con redes de arrastre. Estos consisten en conjuntos de paneles de malla uniformes que forman una gran pared suspendida verticalmente en el agua. Suspendidas en el fondo o en la profundidad del agua una red de arrastre a la deriva o ancladas en el fondo del mar red de arratre inferior, las redes de arrastre capturan peces por sus branquias. Son muy eficaces y particularmente destructivas.
La pesca de arrastre consiste en tirar de una gran red de pesca con mucho peso detrás de un barco, ya sea a medio camino o en el fondo. La red se apodera o aplasta con indiferencia de todo lo que encuentra a su paso. Como resultado, la captura incidental es extremadamente alta y las redes a menudo se pierden debido a choques y colisiones en el fondo.
Efecto devastador sobre el medio ambiente
La pesca fantasma es la captura continua de peces u otros animales como tortugas, aves marinas y mamíferos marinos. Una vez sola en el mar, la red continuará atrapando especies animales que se degradarán, atrayendo a los depredadores carroñeros. Ellos también quedarán atrapados, continuando así el ciclo infernal. Por lo tanto, la red puede seguir pescando por sí sola durante meses, a veces durante años. Es probable que los palangres atrapen otros organismos marinos y dañen el hábitat submarino. Esta pesca continua genera una gran pérdida de dinero. De hecho, el 30% de la pesca mundial se realiza con redes fantasma.
También causan alteraciones del subsuelo marino. Las redes de pesca utilizadas son, de hecho, de nylon, un material muy resistente que tarda entre 400 y 600 años en romperse. Las redes también impiden la formación y desarrollo de corales.
También son peligrosos para la navegación porque pueden causar accidentes en el mar y dañar a los barcos. Los buceadores también pueden quedar atrapados en redes fantasma.
Los paisajes submarinos también se ven afectados. Pierden su belleza que es perjudicial para el turismo.
¿Cómo solucionar el problema?
Los aparejos de pesca son, en la mayoría de los casos, caros, y muchos pescadores hacen esfuerzos considerables para recuperar los aparejos perdidos. Una tecnología que les ayudara en esta investigación sería útil, por ejemplo, el uso de GPS y barcos que puedan identificar la ubicación donde se perdió el equipo y facilitar su recuperación. Los transistores pueden seguir su ejemplo. El avance en el pronóstico del clima ayuda a los pescadores a no utilizar redes cuando se anuncia mal tiempo. La fabricación de redes de material biodegradable puede ser la clave para luchar contra esta plaga. Varios países se han puesto manos a la obra. En Francia, empezamos a centrarnos en las redes biodegradables En la zona de Hauts-de-France, el Parque Natural Marino de los estuarios de Picardía y el Mar de Ópalo ha puesto en marcha, en 2018, una prueba para un futuro programa de acción.
Expediciones de investigación: Varias asociaciones realizan envíos en el mar para recuperar sus redes de pesca y luego reciclarlas. Los productos terminados son variados: gafas de sol, alfombras, muebles, hamacas o patines. Las posibilidades son ilimitadas. Podríamos erradicar el problema instalando contenedores directamente en los muelles o proporcionando a los barcos bolsas muy grandes y resistentes para sus equipos viejos..
La regulación de la pesca es un factor igualmente importante. La prohibición de la pesca de altura más allá de los 800 metros es un primer paso. Además, ha entrado en vigor desde hace algunos años en aguas europeas.